Qué mejor para estas tardes de calor que tomarnos un helado!!!! En mi casa éste es de los que más gusta. Desde hace unos años Jorge, mi hijo mayor es intolerante a la lactosa, tenemos cuidado con lo que toma pero en especial con la leche y los helados, es lo que peor le sienta.
Al pobre se le van los ojos detrás de esas grandes bolas de helado, de los cucuruchos y siempre tiene que elegir uno de hielo. Para que se le quite el deseo lo que hago es hacérselos en casa, así puede comer tranquilo sin pasarse dos o tres días con los molestos dolores de tripa.
